Estamos prácticamente acabando la primera temporada de “Voces”. Como sabéis «Voces» es un programa de V.Iták-Ora y este proyecto tiene como lema la frase “la libertad se halla en el conocimiento”.

Nuestro invitado de hoy tiene un compromiso firme con la divulgación científica como herramienta para llegar a la libertad como bien nos comenta en la entrevista, siempre que se entienda la libertad como la toma de decisiones basada en el conocimiento y no en mitos, en mentiras o en fraude. Aunque para que esto se dé, debemos conocer la realidad de las opciones… Y claro, el problema que se nos plantea es el siguiente: ¿cómo saber lo que es realidad de lo que no lo es? ¿Cuál es la verdadera realidad de las cosas? ¿Cuál es la verdad?

He aquí uno de los grandes problemas de la humanidad, el saber reconocer lo real de lo inventado, en muchas ocasiones con intenciones aviesas… Hoy en día con los atracones informativos de los que somos víctimas se hace patente más que nunca la necesidad de desarrollar la inteligencia de análisis de la información, el espíritu crítico para saber construir barreras ante lo que no es real.

Sin duda saber reconocer qué fuentes de información son fiables ya es una ventaja, pero si dependiendo del tema somos incapaces de reconocerlas, algo que es muy habitual, siempre podemos aplicar la base de todo razonamiento: no dar nada por sentado venga de quien venga y hacerse preguntas. Al fin y al cabo, todo empieza por una pregunta ya que sin preguntas no se obtienen respuestas.

Y respuestas busca siempre la ciencia, respuestas para ir más allá. Eso no quiere decir que la ciencia sea infalible, nada lo es, pero sí que a través del método científico se desarrollan hipótesis con el rigor quirúrgico de las preguntas.

Los grandes avances tecnológicos del siglo pasado, acelerados este siglo nos están permitiendo disipar dudas, aunque también nos están colocando frente a nuevos conflictos éticos.

Uso de células madre, estimulación transcraneal, inoculación de virus… 2stas son algunas de las técnicas que se barajan, ya en el presente o en un futuro próximo, para aumentar por ejemplo la capacidad de los deportistas, pero ¿dónde están los límites? Más aún cuando, como ocurre en el caso de una deportista sudafricana, Caster Semenya, atribuyen sus capacidades a un contenido de estrógenos más elevado de lo habitual y por ello la obligan a bajar la concentración de sus hormonas naturales con meditación, a riesgo incluso de su salud para que pueda participar en las pruebas atléticas de su especialidad…

Por un lado vamos hacia la creación de superhombres y supermujeres de manera artificial, de manera manipulada, hablando ya de transhumanización – la simbiosis del humano con la máquina – y por otro lado, buscamos normalizar todo aquello que se sale de la norma… ¿Dónde se encuentran los límites? ¿Dónde está la realidad? ¿Dónde está la verdad?

No os quiero entretener más porque creo que la siguiente entrevista os va a gustar mucho. Hoy en “Voces” tenemos a José Manuel López Nicolás, un gran divulgador de la ciencia de la vida cotidiana que nos hablará de La ciencia de los campeones, su último libro para que amemos el deporte a través de la ciencia y la ciencia a través del deporte.